ROSTROS DE LA POESÍA VENEZOLANA/ CARLOS JOSÉ MONTESINOS VÍEZ/ LA CASA QUE SOY

 


1.-

NACI NACIENDO PARA AMARTE.

 A: Ysbelis Lorena


Nací amando

desde el vientre de Afrodita

desde las espumosas aguas

del mar...

He dejado mi piel

asentada

en la flor de otra piel

de otro tiempo,

en las huellas del camino...

aprendí a amar

desde la rosa azul del alma

hasta

la rosa negra del sufrimiento. 

Todos sufrimos

cuando hemos aprendido

en el aroma de las aguas

la inmensidad del mar

la infinitud del universo

las constelaciones incontenibles

en el fondo

de un espejo de océanos. 

Te amé en el Pegaso de tus ojos

cristales de miel,

de alcancía

alados por una sutil brisa 

a la orilla de un mar de plenilunio 

donde la luna inocula su cuerpo 

con aguas

de un mar de champagne. 

Amé la mariposa

de tu cuerpo de colores,

el párpado semiabierto del escote

que ventilaba 

la esquirla 

de tus sagrados senos

tus serpeantes pasos voluptuosos 

en el castillo

de mis labriegos ojos.

Te amé 

desde la locura onírica del lecho

hasta la ventana abierta de mis ojos

desde la aurora de mis días 

hasta el ocaso crepuscular de los años...

te amé sin ser mía 

pero,

nací naciendo para amarte.


2.-

EXTRANJERO

A: Rufino Blanco Fombona y Vargas Vila


Extranjero seré 

aun

en lo hondo

de mi tumba

sin patria

olvidado

en las manos

ávidas 

del sepulturero 

quien en su

asidua labor

arrojará distantes

mis huesos 

así como hizo

con otros

que no tuvieron 

con que 

pagar

la perpetuidad

de su 

catafalco

Extranjero seré 

en el regazo

de un país 

sin genes

ascendentes

sólo 

el cálido frío 

de la soledad

y

el rostro nostálgico 

del tiempo

acompañarán 

por siempre

el paraíso 

de un rosal

de rosas

negras...

Extranjero seré 

en las alas

de otros cielos

en el vientre

de otra tierra

sin patria

sin amigos

sin hermanos

sólo 

me acompañan

los corazones

del útero 

de mi esposa

y las entrañas

del aljibe

de mi hija...

Extranjero seré 
como José 
en tierra de Potifar
como Abraham
distante 
de su madre tierra
o como Cristo
llevando
en la cruz 
el desamor
de su propio 
Amor
Extranjero seré...
en este desierto
de soledades
pobladas.


3.-

TE ESCRIBIRÉ
 MIS ÚLTIMOS VERSOS

Quizás 
no sean los mejores
versos
pero,
sí los últimos 
que mi alma te escribe
Contigo soñé 
remando las aguas de la poesía 
el alma de los lirios,
siamesa alma mía...
Contigo
seguí el silencio hasta encontrarlo
como hiciera el Principito en su silente
universo
para luego,
no callar...
No callaron mis letras,
Jamás callarán 
aunque tú 
ya no estés...
Te escribiré mis últimos versos
desde el alma
desde el abismo de la imagen 

donde la esencia canta
y el ser
llora su vasta desesperanza...
Te escribiré mis últimos versos
húmedos 
gélidos 
grácil 
desde los lagrimales 
de la luna
succionando 
agua de mar
en el último plenilunio 
de nuestro amor...
Quizás 
no sean estos los mejores versos
pero, sí los últimos 
pintados con las acuarelas
de Frida Kahlo 
con los tristes grafemas de Neruda
con el ánimo, aun muriendo, de García Lorca
y con el azul poético 
del canto
de Rubén Darío.
No callarán 
mis letras tu ausencia
menos,
la elipsis sagrada
de nuestra distante separación 
Adicionare, aún más,
en mi piel
fluido del útero de la poesía 
nacerá la aurora 
el trinar de los pájaros
abrirán las flores el vientre de sus capullos 
en el excitante pico de colibrí 
despertarán los manantiales 
crecerán las aguas
correrán los ríos 
los ríos 
los ríos 
en el cauce de un poema.
Te escribiré 
mis últimos versos
con las estelas alas
de un mirlo
alejado en las Frías aguas
de invierno...



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