CARLOS A. COLÓN RUIZ/ ROSTROS DE LA POESÍA PUERTORRIQUEÑA/ LA CASA QUE SOY

 



Ave común 


En aquel tiempo yo tenía veinte años

y estaba loco.

Había perdido un país

pero había ganado un sueño.


Roberto Bolaño 


En aquel tiempo yo también tenía veinte años

el Huracán María pasaría en una semana 

y todo lo que me restaba 

era un archipiélago de latas sobre la mesa

los papeles formando volcanes 

entre la cama y mi nariz

el olor a perro mojado, 

la risa de los desconocidos

la duda de la similitud

la pena felina decayendo en la costa

las olas y los pelícanos decorando a los surfistas. 


Vivir en Aguadilla les daba cuna a los poemas

o al menos así parecían las losetas sucias 

el Volkswagen jodido en la esquina

la nevera vacía y las llamadas 

de una madre preocupada. 


Estaba en medio de la ciudad

la montaña y la costa

a salvo de los maremotos y los derrumbes

atado a los atajos y la consejería estudiantil.


Cuando el Huracán pasó 

todo tornó categoría cinco 

dejando el desastre aguadillano 

mis esperanzas

el futuro de la familia


como un sonido de ave común.


Publicado en Hambre Nueva (Ed. Pulpo, 2019).



De estos días


Uno no espera que el ron de estos días 

aniquile las excusas que nos tragamos,

que quedan atoradas en la faringe

esperando un milagro entre la mugre

que devoramos y las palabras que nunca decimos

para seguir con otros días.


Esperanza, sueños, ilusiones.

Todos le tiñen un astro distinto,

un ladrido eterno, inerte, frío y desolado, 

características inhumanas, de tipo volador y espacial,

situaciones que no cuajan con las paredes

blancas que proyectan las nubes o el sistema. 


Es que, vociferar entre sollozos

va de cabeza entre una esquina de cama

y un resto de mundo que no entiende

de súplicas, de lo que mordemos,

de lo que escribimos en verso,

piedra, bloque, papel y carne.


La vida no luce como el campo entre la ventana

sino como una cortina que se mueve ligeramente

con el viento de diciembre. Ya no es azul, 

ya no trae senos calientes y espacios abierto. 


Sin dudas. Sin misericordia. 

Este día me arranca las cáscaras

y yo, que ando entre silencios

le pido que venga mañana

con jugo, pan y miel

que aún nos queda mucho por decir.


Publicado en Visión de Carne (El taller blanco ediciones, 2020).



Las notas 

Daniel me recomendó leer Las partículas elementales

de Michael Houellebecq 

y Limónov de Emmanuel Carrère 

y yo lo tengo anotado en un sticky note

frente a mi escritorio. 


También tengo en notas la fecha límite 

para enviar mis poemas

a una exhibición foto literaria 

donde mis compañeros editores

y yo hemos sido invitados a exponer. 


No me faltan las fechas finales 

de los premios importantes

de Iberoamérica y El Caribe, eso incluye festivales 

de prestigio y editoriales de interés. 


Mi novia me encomendó comprar el desayuno

y anoto lo necesario, anoto las líneas favoritas

de mi última lectura y todo 

lo que puedo olvidar con inmediatez.


De niño siempre le temí a la pérdida de memoria

olvidar mi nombre y el mundo que he pisado, 

olvidar los ladridos de mi perro 

y el rostro dulce de mi madre. 


No puedo evitar los ojos húmedos al pensar que podría 

olvidarme de mi presencia, 

teniéndola que buscar en notas pequeñas 

que se despegan del tablero, 

porque también las he olvidado.


Publicado en Este día nunca volverá (Santa Rabia Poetry, 2022)



XIX

Siempre para Nelmaries. 


estoy de acuerdo con mi muerte

estoy dispuesto a quedar fallecido

en cualquier tiempo y espacio

a cada migaja de mi pellejo

le queda la sustancia de lo irreal

impregnada en la inmensidad

que este mundo prohíbe 

también estoy de acuerdo con arriesgar

la cordura

la voluntad

la escasez de mi imaginación 

y sobre todas las cosas que puedo restar

de mi presencia innecesaria

me quedo con el amor 

con las mañanas frías

entre tus brazos calientes

estoy de acuerdo con nuestra mirada

con nuestros cuerpos envejeciendo entre abrazos

con quedarme sin dignidad

ser humillado

con tal de ser siempre

el que vive contemplándote. 


Del libro inédito Nada.  


*

Carlos A. Colón Ruiz (San Sebastián, Puerto Rico. 1997), autor de Hambre Nueva (Editorial Pulpo, 2019), Visión de Carne (El Taller Blanco Ediciones, 2020) y Este día nunca volverá (Santa Rabia Poetry, 2022). Ha publicado en diversas revistas, antologías y blogs en México, Chile, Guatemala, Colombia y Puerto Rico. Sus poemas han sido traducidos al inglés y el italiano. Es el director de la Editorial Pulpo y pertenece a la junta editorial de la Revista Demoliendo Hoteles (https://demoliendohoteleslit.com/). También ha participado en festivales y lecturas en Puerto Rico, Cuba, Colombia México, Honduras y Guatemala. 


Share:

0 comentarios